27 de mayo de 2014

ESPERANZA EN EL VIENTO


Después de casi 48 horas de conocer los resultados de los últimos comicios, uno no puede ocultar su mediana satisfacción, progresivamente en aumento. 
Digo mediana porque todos de una forma u otra analizamos los resultados, unos antes otros después, unos cegados por sus ideologías, otros más objetivamente, pero un servidor careciendo de esto último, también tiene su propia conclusión.
 
Y son dos, muy nítidas. La primera, que aunque parece que se intuye un cambio verdadero y más que deseado, no se me va de la mente que aunque dentro de los sistemas políticos existentes, la democracia es el menos malo de todos, aún así en el fondo no la poseemos, sigo creyendo que esté quien esté, los que verdaderamente marcan el rumbo no están ni estarán nunca en las papeletas electorales. Las llamadas fuerzas o poderes fácticos. € y $ principalmente.

 La segunda conclusión es que dentro del bipartidismo, sí existe una gran diferencia, y es la forma de digerir las derrotas y las victorias, unos aceptándolas y empezando entre comillas a levantarse, a reflexionar, a tomar decisiones que produzcan cambios. 

Otros convencidos de su victoria y creyendo así mismo que el vaso sigue medio lleno, cuando la realidad es que está ya, tres cuartos de litro vacío. 

Por declaraciones de algunos, parece que son los únicos salvadores no solo del país, sino del planeta y parte de nuestro sistema solar, la única alternativa existente. Todo lo tienen que controlar, todo lo tienen que manejar, todo les pertenece. Alimentando a la hiena de la soberbia, con descalificaciones e improperios a los muy dignos vencedores, fruto de la única ideología que practican.

 Se puede ser conservador, es muy respetable, pero la arrogancia, avaricia, soberbia y envidia solo pertenece a los seres más mezquinos, por muchos doctorados conseguidos. Esto reafirma mucho más mi opinión, sentir e ideológicamente hablando mi animadversión hacia ellos.

Y todas las demás preguntas, por cierto que cada día son más, planteadas en esta época que nos ha tocado vivir, pues si, aunque parezca fantasía, las respuestas a veces, las sigo encontrando en el soplar del viento.


8 de mayo de 2014

NATURALEZA MISMA





Alguien dijo, que mil máquinas nunca serían capaces de crear una flor. Y que honrar lo sagrado en la naturaleza, nos recuerda lo sagrado en nosotros mismos.

Por más que me esfuerzo no encuentro frase, definición o comentario para describir a la naturaleza misma. 

Solo el que sepa lo que se siente al abrazar un árbol, mantener un puñado de tierra entre las manos mirando hacia el sol, bañarse en un río teniendo como únicos testigos, las estrellas, la luna, los seres que habitan en el entorno, o interpretar la mirada de un ser sin voz (animal) sabrán darle de sobra un auténtico significado a lo que nos rodea, y que en la mayoría de los casos innatamente,  no le prestamos atención.

No hace falta traducción. No existe definición.